Curcurina: el dolor no puede ganarte

La inflamación es el proceso de respuesta de nuestro organismo, con finalidad defensiva, frente a ciertas agresiones físicas, químicas o biológicas (infecciones). Trata de eliminar la causa inicial de la lesión y de reparar los daños ocurridos durante el proceso.

Sus signos principales son: calor, rubor, tumor, dolor e impotencia funcional. El aumento de tamaño, o tumor, se produce por el acúmulo de líquido  y de células en el foco de lesión; y el dolor, por el estímulo sobre las terminaciones nerviosas de la zona.

Alrededor de un 20% de la población adulta española padece dolor crónico, lo que equivale a que, aproximadamente, 6,5 millones de españoles sufren dolor de forma mantenida en el tiempo; siendo las mujeres las que más lo padecen. Se trata de dolores musculares y óseos, en general y de espalda, en particular (lumbar y cervical); también dolores de cabeza (12%), problemas digestivos (5%) y dolores ginecológicos (4%).

¿CÓMO NOS AYUDA LA FITOTERAPIA A DISMINUIR LA INFLAMACIÓN Y A ALIVIAR EL DOLOR?

La bibliografía científica nos muestra distintas especies vegetales que poseen propiedades que ayudan a mejorar los procesos inflamatorios y a disminuir el dolor.

El uso de la raíz de la Cúrcuma está avalado por los resultados de múltiples estudios. La evidencia científica de la actividad antiinflamatoria, tanto en inflamación aguda como crónica, de su principal compuesto bioactivo (la  curcumina) es muy alta. Su eficacia para disminuir el dolor también ha quedado demostrada en diferentes estudios que evaluaban el dolor postoperatorio y el articular (por atrosis y artritis).

A la Pimienta negra se le atribuyen distintas propiedades saludables asociadas a su principio activo principal, la piperina. Destaca que mejora la biodisponibilidad de los otros ingredientes con los que se toma y que reduce la inflamación y la percepción del dolor, al poseer actividad antiinflamatoria y analgésica potentes.

El compuesto bioactivo principal de la raíz del Jengibre, usada en la cocina y en las medicinas tradicionales asiáticas, es el  gingerol. La bibliografía científica recoge estudios con jengibre realizados en humanos, en los que los resultados avalan que esta planta posee actividad antiinflamatoria y muestran cómo mejora y reduce el dolor articular, el muscular (como en la lumbalgia o las molestias musculares habituales de los deportistas), la cefalea y la dismenorrea o dolor menstrual. Además, el jengibre es conocido por su actividad digestiva, y carminativa: ayuda a hacer las digestiones y disminuye la formación de gases.

 

INGREDIENTES

Por 1 cápsula:

Cúrcuma granular (E.S. 20:1, titulado a ≥ 95% en curcumina, 550 mg equivalen a 11.000 mg de polvo de raíz), Jengibre (E.S., 50 mg, titulado a ≥ 5% en gingerol), Agente de carga (celulosa microcristalina), Pimienta negra Bioperine® (E.S. 50:1, 3 mg, titulado a ≥ 95% en piperina), Antiaglomerantes (estearato de magnesio, dióxido de silicio).

Cubierta: Agua, Hidroxipropilmetilcelulosa.

MODO DE EMPLEO

Tomar 1 cápsula al día con el desayuno o la comida, con ayuda de agua.

Dosis diaria recomendada: 1 cápsula.

PRECAUCIONES

No se recomienda su uso durante el embarazo y la lactancia.

No tome este complemento alimenticio si es alérgico o intolerante a alguno de sus ingredientes.
No se recomienda su uso en caso de padecer cálculos biliares.

PRESENTACIÓN

Envase de 30 cápsulas vegetales.