Se emplea la raíz como parte activa de la planta. Es rica en aceite esencial, resina, fitosteroles, ácidos fenólicos y polisacáridos inmuoestimulantes. Sus acciones farmacológicas fundamentales son: inmunomodulador e inmunoestimulante. La equinácea es capaz de estimular las defensas del organismo. Es un excelente antiviral, antiinflamatorio, antirradicales libres y cicatrizante.

La equinácea está especialmente indicada para el tratamiento y la prevención del resfriado común y la gripe.

Photo: Echinacea purpurea by Zinas (Z. Zolubas)